Vecinos, cuando hablamos de vecinos podemos hablar de Francia y Portugal, del que vive a tu en la casa de al lado, pero yo voy a hablar de nuestros vecinos autónomos, en particular del País Vasco.
Parece ser que la marca España tiene cierto reconocimiento a nivel europeo, a nivel mundial, pero como tal, se dedica a las grandes exportaciones, se representan con nombre a las grandes empresas que mueven millones de euros con sus contratos de compra-venta. Sin embargo a nivel más micro, en las economías comunitarias, no esta tan extendida por lo general, la práctica de la marca España. No existe ninguna señal, exceptuando el “made in” o “fabricado en”, que indique que ese producto este fabricado en nuestro país.
Sin embargo en el País Vasco han diseñado un sistema fantástico, que indica a los consumidores que los productos se han producido, elaborado y/o transformado en la comunidad, con unos determinados criterios de calidad, conservando la garantía del origen, con autenticidad. Hablo del “Eusko Label”.
No quiero decir con esto que productos de otros países no tengan criterios de calidad, obviamente han de cumplir los requisitos exigidos a nivel europeo para entrar en la Unión Europea y por supuesto, no estoy hablando de precios.
Quiero hacer ver que esta denominación de “Eusko Label”, abarca a toda clase de productos agroalimentarios, desde miel, pasando por bonito y aceite de oliva. Y existe un gran conocimiento por parte de la población de este nivel de calidad de los productos.
El formalizar a nivel autonómico, incluso nacional una marca que determine unos criterios cumplidos, por encima de lo exigido a nivel europeo hará ver a la población de un solo vistazo, que el producto proviene de la tierra, que está certificado y ante cualquier problema podemos acudir incluso al origen principal de la materia prima y por supuesto la calidad. Es algo envidiable el que hayan conseguido que la población valore y reconozca esta marca, la K de calidad “Eusko Label”.
Tal vez también podría ser ampliable, ampliable a otros sectores, como el del calzado. Solo es una idea.
Carlos Laorden.